"va a vender todo lo que tiene y compra el campo"
Los Evangelios no nos ofrecen nunca una definición concreta de lo que es el Reino de los Cielos, sino que nos dan rasgos, características, similitudes -como el caso del evangelio de hoy o condiciones para entrar o no en él. Con todo, podemos afirmar por estas características o rasgos que el Reino de los Cielos alcanza su mayor manifestación en la misma persona de Cristo, así, Cristo mismo es el Reino de los Cielos.
Por eso no sorprende que quien se ha encontrado con él, como nos dice el Evangelio de hoy, deje todo lo que tiene para seguirle: al encontrarse con la Persona de Cristo, la escala de valores de nuestra vida cambia, y aquello que considerábamos valioso, se vuelve nada a la par de Él.